Jennifer Lawrence ha vuelto y lo ha hecho como sólo ella sabe: a lo grande. Tras varias semanas complicadas, por la filtración de sus fotos desnudas (junto a las de otras celebrities como Kim Kardashian, Sarah Hyland o Cara Delevingne), la oscarizada actriz presentaba su nueva película, Serena. Lo ha hecho en el Festival de Cine de Londres y allí ha enamorado a propios y extraños. Eso sí, en el aeropuerto iba tapada hasta la cresta. Y es que la joven, de 24 años, ha aparecido luciendo su habitual sonrisa y, sobre todo, un escote de vértigo que ha provocado taquicardias a más de uno de los presentes. Su vestido negro de Dior ha acaparado flashes, miradas y piropos a partes iguales. Y no es para menos. La actriz estaba espectacular. Tanto que nadie ha echado en falta a su pareja de hecho cinematográfica, Bradley Cooper, con quien repite película por tercera vez. Se enamoran estas star tan rápido, que me parece ver un reality show como "Gran Hermano". Leer MÁS : Jennifer Lawrence, escotazo y sonrisa en Londres
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