La Navidad es tiempo de recuerdos, sueños, algunos ya han venido y otros quizá vuelvan, o vendrán nuevas ilusiones, ternuras, sentimientos, algo bueno seguro vendrá. Aunque se empeñen los recuerdos duros en golpear la mente, hay una vocecita infantil que se negará a dejarles adueñarse de nuestra alegría, escucha bien es vocecita, es la tuya, la de cuando eras un crío y pensabas que el Oeste estaba en ese cine de barrio, al igual que Pompeya y las de romanos. O cuando eras cría y sabías seguro que el principe azul, el tuyo, era ese actor tan guapo que tenía fiebre si bailaba el sábado, o brillantina en el pelo, o tu eras Thelma o Louise y Brad Pitt se enamoraba de ti. O era un héro de Marvel, ese era un sueño de Elsa Pataky y ha pescado al Dios Thor. Siempre hay algún milagro, y en cualquier momento a ti te puede suceder, no cierres los ojos y lo descubrirás, creeme, he visto la lista de personas con suerte y estás la número 21. Dios os y nos Bendiga a todos, Feliz Navidad.
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