"¡Éste es el peor día de mi vida!", dice entre lágrimas la mamá en una de las escenas más conmovedoras de "Boyhood". Así, sin nombre propio, identificada sólo por su filiación con el protagonista de la película realizada por Richard Linklater a lo largo de doce años, Patricia Arquette construyó una secuencia inolvidable en una película repleta de momentos así: melancólicos, sencillos, cotidianos y tan dramáticos como a veces puede ser la vida de cualquiera. Durante esos minutos fantásticos, "Boyhood" deja de ser el relato de la vida de ese chico para centrarse en esa madre, en Arquette, protagonista absoluta de "la escena del adiós" como la llama Linklater. Es, según él, el cierre emocional del film y cada uno de sus latidos depende de la actriz que acaba de ganar un Globo de Oro y que es firme candidata a llevarse el Oscar en la categoría de intérprete de reparto. Buena Suerte Patricia, te lo mereces todo por excepcional y perfecta cineasta. LEER MÄS::::FUENTE::::Patricia Arquette: Nunca me creí la fantasía de Hollywood
25 de enero de 2015
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