En un momento de la oscarizada Argo (2012), el veterano productor recreado por Alan Arkin corrige a propósito de un nuevo proyecto de película, entre categórico y nostálgico, afirmando que «si hay caballos, es un wéstern». Hacía tiempo que Hollywood ignoraba a los caballos en el wéstern más allá de intentos esporádicos, de modo que la coincidencia de varios rodajes de altura adquiere categoría de acontecimiento, sobre todo al llegar avalados por autores de solvencia artística reconocida, auspiciados por productoras como MGM, Sony o The Weinstein Company, y actores de éxito al frente de sus repartos. Se cargan así, aunque sea por poco tiempo, el tópico de que el mercado actual desprecia aquel cine del Oeste que nutriera las pantallas mundiales hasta bien avanzada la primera mitad del siglo pasado. Llegarán en clave de recreación histórica o de puro género, con guiones adaptados a la realidad actual aunque respetando su iconografía clásica.Es el caso de The Revenant, con González Iñárritu a la cámara y Leonardo Di Caprio en el cartel, así como de la esperada The Hateful Eight, con Tarantino como director y Channing Tatum con Samuel L. Jackson, tirando del elenco. Ambas intentarán meterse en la carrera a los Oscar y para esto tendrán un estreno restringido el 25 de diciembre en EE. UU.También de cara a los siguientes Oscar, pero en diciembre del 2016, se estrenará The Magnificent Seven, que actualmente rueda en Luisiana Antoine Fuqua, con Denzel Washington y Ethan Hawke junto a un nutrido reparto. Es una nueva versión de Los siete magníficos (Sturges, 1960), tomado a su vez del clásico Los siete samuráis (Kurosawa, 1954), con varios pistoleros defendiendo a los vecinos de una aldea.+++++El wéstern cabalga de nuevo a lomos de grandes directores de Hollywood
