Avril Lavigne en las playas de St. Tropez se lo debe pasar pipa.
Y mira que St. Tropez era un pueblecito de pescadores olvidado de la mano de Dios.
Se le ocurrió a la diva Brigitte Bardot hacerse una residencia de verano, "La madrague" (La madriguera) creo que se llama.
Y empezó aquello a subir como la espuma, si antes casi regalaban terrenos, después de la B.B. costaban como la onza de oro.
Lo que hace un famoso por un sitio, es una publicidad impagable.
Y después vinieron las películas de Louis de Funes, aquellas de "El gendarme en St. Tropez", y halaaaa más publicidad.
Avril Lavigne ha escogido muy bien para pasar unas horas, o un fin de semana, o lo que le venga en gana.
Que bonita y que bien canta Avril...
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